Llevar un estilo de vida saludable y lograr mantenernos en nuestro peso ideal tiene mucho que ver con si tenemos o no un refrigerador saludable.
Imagínate si al abrir el refrigerador tuvieras un paraíso de frutas y verduras frescas listas para comer o para preparar alguna receta, eso no es imposible.
Con una limpieza profunda y esta lista podrás aprender las bases para tener un refrigerador saludable que te ayude a bajar de peso.
Todas las disponibles de temporada, que no sean frutas deshidratadas, enlatadas en almíbar o verduras en aceite:
Cuida las porciones de: papas, camote o batata, aceitunas, aguacate / palta y yuca.
Carnes magras, sin piel y con toda la grasa visible retirada. Incluye otras proteínas de origen vegetal y animal.
Si tienes un antojo a cualquier hora, arma bocadillos saludables en porciones individuales para que los tengas listos para disfrutar.
En el supermercado hay paquetes de proteínas magras listas para cocinar, ahorrarás tiempo y tendrás variedad de platillos toda la semana.
Llena lo más posible de frutas y verduras frescas. Las frutas que más te gusten guárdalas en contenedores transparentes al frente del refrigerador, ya listas para comer.
Combina cualquier verdura con una proteína y harás un delicioso guisado que te mantendrá satisfecho por más tiempo.
Cambia los refrescos, sodas y jugos de frutas envasados por aguas minerales, refrescos o sodas cero azúcar.
Elige salsas y condimentos que no tengan grasa como el pico de gallo o la salsa verde para potenciar el sabor de tus comidas.
Si controlas bien las porciones de productos lácteos y adquieres versiones reducidas en grasa o sin grasa, podrás lograr una alimentación balanceada, sin sentir que estás «a dieta».
Sabemos que el espacio de tu refri no puede ser 100% saludable, debe haber ciertos productos para toda la familia que son altos en calorías, grasa y azúcar. Para estos productos te recomendamos almacenarlos en la parte baja y hasta atrás, para que sea un poco complicado alcanzarlos y no tengas la tentación en frente al abrir el refrigerador.
En el congelador no olvides almacenar fruta y verdura, la podrás utilizar en cualquier momento, incluso fuera de temporada para crear sopas, omelets o guisados.
Abastece el congelador de productos como: aves, cerdo, res y pescado.
No olvides que para comenzar, el primer paso es limpiar el refrigerador, deshacerte de los alimentos que no te ayuden a bajar de peso y darte una vuelta al supermercado con tu lista saludable para las compras.
Teniendo los alimentos correctos en tu refrigerador, será más probable cambiar tus hábitos alimenticios positivamente.
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